Dios, te doy las gracias por tomar control de las cosas que para muchos
parecen imposibles de que sucedan,
como controlar la fuerza de la naturaleza,
como hacer milagros y maravillas.
Con tu palabra Dios mío se cambia una situación, con tu poder no hay fuerza que pueda vencer, gracias por lo que haces y lo que harás alrededor de mí.
Mayor eres tú Señor que cualquier gigante que se levante contra mí,
puedes hacer obras maravillosas,
inigualables e inexplicables.
Te pido que sigas obrando,
que con la fuerza de tu amor
desbarates los planes malvados
que haya a mi alrededor,
que revientes cadenas de opresión
y des liberación de problemas,
de dificultades que estoy enfrentando.
Sé tu mi roca fuerte, mi castillo
y la fuerza de mi salvación.
Confío en tí, mi Dios amado
y te agradezco por mostrar tu poder,
tu fuerza, que me hace más que vencedor
porque me has amado y en ti
yo me fortalezco y sigo adelante. Amén.
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