Existía en un bosque una ranita que vivía en un charco, era tan presumida que cualquiera que se acercara a ella terminaba por presumirles lo grande que era su charco... No existía para ella un lugar más grande, inmenso y profundo que su "Gran Charco"
Cierto día, una gaviota que emigraba por ese lugar, decidió pararse en el charco de aquella ranita, la ranita entusiasmada por aquella nueva visita no perdió la oportunidad de presumir cuan grande era su charco, la gaviota muy serena y atenta la escucho y al finalizar la explicación de la ramita..
Le contestó:
"QUERIDA RANITA, TU DICES QUE TU CHARCO ES EL MAS GRANDE DEL MUNDO PORQUE NO CONOCES EL MAR."
Cuantas veces no nos ha pasado que creemos que lo que nos pasa es lo peor o que la situación en la que estamos es la mas complicada, nos ahogamos en un pequeño charco, cuando hay situaciones mas dolorosas o difíciles que las nuestras.
Nunca creas aparte que lo que tienes es lo mas grande o lo mejor, porque siempre habrá cosas mejores que conquistar.
Sal de tu pequeño charco y conoce el mar de bendiciones que la vida tiene para ti.
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